
ada día las circunstancias que estamos viviendo nos llevan a rememorar otros tiempos, otras experiencias, recordar como comíamos antes, el hecho de haber disfrutado del saludable pescado, de aquellos tiempos, nos hacen evocar esos momentos. Cuando saborear hoy en día un plato a base de pescado es bastante oneroso, preparar aquellos platos cuesta una barbaridad. Disfrutar ahora de un pescado, una ensalada con tomate margariteño, cebolla, vegetales, se traduce en un gusto único; pero el bolsillo queda muy malogrado. En lo particular siempre me ha gustado el pescado en todas sus formas. Sin embargo, a pesar de los altos costos, una especie que sigue estando en el gusto y preferencia de la gente, un pescado muy popular y de calidad, que se mantiene a precios accequibles es el Corocoro; no como los costos de ayer, pero si con el sabor y placer de disfrutarlo ahora.
Es una expresión muy margariteña que denota complacencia, satisfacción, aceptación, aprobación. Es un sí, un estar a gusto, un amen, santa palabra. Es el deseo de muchos comensales, para manifestar la gran satisfacción que se siente al comerse este rico pescado, un Corocoro frito con arepa, y listo, pareciera suficiente. El Corocoro es un pescado de gran aceptación por una gran cantidad de comensales a todas las edades, su fácil preparación contribuye a que se pueda resolver y preparar un plato prontamente. Con arepa, cazabe, yuca, ñame, ensalada, arroz, plátano frito, es realmente muy delicioso. Otra de las cosas que lo hacen muy apetecible es su carne blanca, y las pocas espinas que contiene su pulpa. Su excelente sabor lo hace ser aceptado por todos; de allí que el Corocoro se haga tan popular en la mesa de los margariteños y de muchos venezolanos.
El Corocoro es un pescado que se consigue frecuentemente en las costas margariteñas, en todo el Caribe. Se le consume en hervido, sabrosos sancochos, con ají margariteño, a la plancha, en parrilla, también asado. Es un “espectáculo”, ver como muchas personas disfrutan con chuparse hasta el último huesito del Corocoro, y quienes lo hacen se llevan la emoción de haber comido un buen pescado, que comparativamente con los precios de las otras especies es “solidario”. ¡Ahora si comí pescado!, me dijo un amigo, cuando juntos despachamos varios Corocoros, un mediodía, con un par de frías en la mesa, y sin cubiertos.
El Corocoro también ha sido objeto de inspiración para diversiones, grupos folclóricos, canciones, carteleras, bailes populares en carnavales y festivales. Las ferias del Corocoro buscan estimular la creatividad y divulgar la infinidad de usos y formas de preparación.
Su tamaño, unos 10 cm aproximadamente hace que se puedan preparar varios al momento; seguro usted se comerá más de uno.
Juan Bermúdez, es un amigo de la Población de La Guardia, en el municipio Díaz, del estado Nueva Esparta. A Juan, le gustaba mucho pescado, su favorito el Corocoro frito, resulta y acontece que los kioscos donde venden comida, los sitios donde preparaban pescado, él siempre los frecuentaba, pedía que le sirvieran Corocoro, sino había, insistía que le sirvieran el pescado que tenían, al final, su expresión: ¡esto sabe a Corocoro!, de allí que lo “bautizaron” con el apodo de Juan Corocoro. Creció, y en la población, y a todas partes donde iba se presentaba como Juan Corocoro. No lo conocían como Juan José Bermúdez Perdomo, sino como Juan Corocoro.
El Haemulon plumierii, de nombre común corocoro, chac-chí, ronco arará o ronco margariteño, es un pez de la familia de los haemúlidos distribuido por la costa atlántica de América, en todas las costas caribeñas.
Pueden alcanzar 63 cm y 5 kg de peso, los hay más pequeños. Es un pez caracterizado por ser gruñidor, en sus dorsos pueden observarse líneas azules que lo caracterizan. El color debajo de las escamas es en general amarillento, con muchas líneas azules oscuro en su cabeza.
Las escamas en trazos de su cuerpo son azules y amarillas que en conjunción forman patrones distintivos para cada pez. El interior de su boca es de color rojo.
El Corocoro ha vuelto por lo suyo, hoy en día sigue siendo tan popular como antes, es un pescado infaltable en la mesa de muchas familiares por todas las ventajas antes señaladas. A falta de carite, pargo, mero y otras especies, rico es el Corocoro, sigue siendo añorado por muchos.
Comentarios
Evianos tu comentario